Normalmente salen a la primera, depende de donde las consiga, no todos los cocineros son igual de explícitos en sus recetas.
Esta receta la tengo pendiente desde Diciembre de 2014, cuando publiqué el "crumble de manzana",
por fin hoy me he decidido a hacerla, por primera vez, aunque no tengo todos los ingredientes que indica, pero si unos hermosos melocotones (hay que aprovechar los productos de temporada), así que voy a permitirme la licencia de hacer algo similar a esta receta que tengo y la que publiqué con manzanas.
Ingredientes:
2 melocotones de viña maduros
1 chorrito de Oporto
azúcar al gusto
iogourt griego
para la crosta:
150 gr. de harina
100 gr. de mantequilla
75 gr. de azúcar
Esta receta incorporaba a la crosta almendra molida, pero como no tenía en este momento, he utilizado los mismos ingredientes que utilicé en el de manzana. Las cantidades que indican son más pequeñas, pero a mi esta crosta me encanta, por lo que le he puesto un poco más.
Al ser un molde más pequeño, la crosta quedará más gruesa y necesitará más tiempo de cocción, lo cual también he considerado buena idea, para que los melocotones se deshagan un poco y adquieran todos los sabores del conjunto.
Empezamos pelando y cortando los melocotones y los dejamos macerar en Oporto y azúcar al gusto, unos 15 minutos.
Después en un bol ponemos la harina, la mantequilla a temperatura ambiente y el azúcar y lo amasamos con la mano hasta que se forme una especie de migas.
HORNO a 180º Tiempo: 30 minutos
los primeros 15 minutos lo he puesto en el centro del horno y los 15 minutos restantes he subido la rejilla hacia arriba.
Retiramos y dejamos enfriar sobre una rejilla, ya que siempre es bueno que respire por abajo.
A la hora de servir lo hacemos con iogourt griego.
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