para la base:
50 gr. de azúcar
90 gr. de mantequilla
150 gr. de harina
60 gr. de almendra molida
para el relleno:
260 gr. de azúcar
500 gr. de queso ricota fresco
330 gr. de queso crema tradicional
4 huevos
60 ml de zumo de limón
1 cu. de ralladura de limón
1/2 cu. de estracto de vainilla
1 cu. 1/2 de maicena
1 cu. 1/2 de agua
para decoración:
fresas y frambuesas
azúcar y agua
En un bol introducimos los ingredientes para la base y lo mezclamos todo con los dedos hasta lograr integrar la mantequilla.
Cogemos un molde de pinza, le damos la vuelta a la base, colocando papel sulfurizado encima y colocamos el borde cerrándolo con la pinza. Así podremos desmoldar con facilidad.
Echamos la base en el molde y aplanamos, si es preciso con el dorso de una cuchara, para dejarlo bien liso,
y lo ponemos al
HORNO a 150º Tiempo: 15 minutos, para que quede un tono dorado.
En otro bol colocamos los ingredientes para el relleno, disolviendo antes la maicena con el agua.
Batimos y colocamos el relleno encima de la base, una vez se haya enfriado un poco, no sin antes haber untado de mantequilla los bordes, para poder desmoldar con más facilidad.
HORNO a 150º Tiempo: 1 hora, después apagar el horno, pero dejar dentro la tarta 1 hora más.
Pasada la hora, ponerla en la nevera, al menos 2 horas.
Para decorar hacemos un almíbar con las fresas (ver: etiquetas_ guarnición postres) y las frambuesas.
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